
sentìa que el chico que acababa
de conocer se iba metièndo en mi
mente, como si fuera uno de esos
pensamientos que te consumen
mientras tratas de buscarle una
soluciòn , y aùn cuando la soluciòn
es simple, sòlo quieres sentir la
sensaciòn de ser consumido por
ese estupor, sin importarte el tiempo
que te tome o las consecuencias que
puedan derivar de esa decisiòn, el
sòlo hecho de ser envuelto en lo que
parecìa el renacer de una fantasìa
o el sueño de alguièn que jamàs quiso
despertar, era sublime...