Durante muchos dìas habìa evitado
visitarla porque tuve miedo de caer
enamorado, sin saber que mi miedo
era inexistente, ya que desde hacìa
mucho tiempo habìa caìdo preso de
sus encantos, y en cierto modo, entre-
gado voluntariamente mi alma a sus
deseos.
nas siempre dirà lo que siente cuando
deba decirlo, sin importar lo duro que
parezca, lo dirà porque te ama, y la rosa
de mi jardin no era la excepciòn.
Con una voz delicada pero firme, mi
rosa preguntò : ¿ por què no tomas la
iniciativa ? .
Uy! le había llegado la hora de la verdad.
ResponderEliminarjajajajaja...
ResponderEliminarasi es Carla...¡
gracias por compartir.
Linda tarde ¡¡
Bella noche de paseos por el jardín, tiernos sueños
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